Herberth Cuba García

Médico – Analista en temas de Salud

HERBERTH CUBA GARCÍA
Artículos

Déficit de vacunación infantil y estrategias del gobierno


¡Compártelo!

Cerca de 50,000 niños menores no han completado su inmunización

El diario oficial El Peruano, el primero de septiembre del 2022, recoge declaraciones en las que “el Minsa advierte déficit de vacunación infantil contra la polio y otras enfermedades”. Señala también “que cerca de 50,000 niños menores de cinco años no han completado su inmunización” y que “hasta este momento, la cobertura de vacunación está en 45%, pero deberíamos estar en un 56%, tenemos una brecha de 11%, lo que significa que cerca de 50,000 niños no han completado su vacunación, especialmente contra la poliomielitis”. Asimismo, remarca que “en el Perú no hay casos de polio desde hace 31 años, pero es un riesgo tener bajas coberturas de vacunación en las poblaciones vulnerables, como los niños menores de cinco años, pues podría ocurrir un rebrote de enfermedades ya controladas o eliminadas.” 

Por lo tanto, el Minsa exhorta a los padres de familia a llevar a sus hijos a vacunar, con su Documento Nacional de Identidad (DNI) para verificar en el sistema informático el tipo y la dosis de vacunas que ya se ha aplicado el menor y cuales aún están pendientes, para proceder a complementar el proceso integral de inmunizaciones. Señala también que las dosis para estar protegidos contra la poliomielitis son cinco. Una dosis inyectable a los dos meses y otra a los cuatro meses de vida, para luego continuar con tres dosis orales: la primera a los seis meses, luego el refuerzo a los 18 meses y a los cuatro años de vida. Por último, señala que “el Perú cuenta con 17 vacunas que protegen de 27 enfermedades”, pero resalta que “15 de ellas deben ser aplicadas antes de los cinco años de edad para tener protección contra las enfermedades correspondientes”.

La exhortación que realiza el Minsa para cerrar las brechas existentes en la vacunación infantil es solo el reconocimiento de sus falencias. El 03 de mayo del 2022, el ministro de Salud acudió citado por la Comisión de Salud y Población al Congreso, para que explique, entre otros puntos, el diagnóstico de la situación del Minsa y del Sistema Nacional de Salud. En ese contexto, se puso en evidencia, los retrasos en la vacunación en general, debido a que, por la pandemia, se habían soslayado las otras vacunas que no eran contra el Covid-19. Además, entre el 23 y 30 de abril del 2022, se realizó la Semana de la Vacunación de las Américas, por tanto, ya se habían corregido “en algo” las coberturas de vacunación, pero, aun así, seguían bajas, sobre todo, en las poblaciones vulnerables, en las comunidades nativas u originarias, alto andinas y dispersas, así como en los migrantes, entre otros. 

Además, la exhortación del Minsa tampoco ha sido acompañada con una estrategia de intervención, con enfoque comunitario, ligada a la conformación de Redes Integradas de Salud y a los establecimientos del Primer Nivel de Atención, es decir, a los más de 8,000 puestos y centros de salud que existen en el territorio nacional. Hay que acotar, que las campañas de la Semana de la Vacunación sirven para cerrar brechas, recuperar tiempo perdido, eliminar inequidades y para consolidar los efectos de las inmunizaciones. Sin embargo, no reemplazan a la vacunación regular, a aquella estrategia de intervención que se realiza con planificación diaria y continuada en el tiempo bajo un esquema aprobado y adaptado a la diversidad geográfica, económica, social y cultural (intercultural) del país. Estas consideraciones sirven para valorar la cifra de 50,000 niños que han quedado rezagados y la importancia de fortalecer el proceso de inmunización.  

La aseveración de que “en el Perú no hay casos de polio desde hace 31 años” no se ajusta a la realidad. Si bien es cierto que, en agosto de 1991, en Pichanaki, en el departamento de Junín, se detectó el último caso de transmisión de virus salvaje en América, y por tanto, el año 1994, se declaró la erradicación de la polio en todos los países del continente americano. También, es cierto, que el 2003, en Moquegua se notificó el primer caso de poliomielitis paralítica causada por la vacuna oral (SABIN). Luego el 2010, un caso en Lima y el 2011, dos casos más en Lima y uno en el Callao. Estos casos ocurrieron en momentos en que las coberturas de vacunación contra la polio estaban por encima del 90%, sin embargo, estuvieron relacionados con la vacuna oral, cuya ocurrencia se produjo, en todos los casos, en personas con algún nivel de inmunodeficiencia.  

Debido al reclamo de las familias, de los médicos, sobre todo, de la Asociación Médica Peruana, se introdujo en el esquema de vacunación la forma parenteral (inyección) de virus del polio inactivado, que no tiene ese riesgo.  Además, la Comisión de Salud del Congreso del periodo 2011-2012 realizó mesas de trabajo con los familiares y los funcionarios del Minsa, para corregir el esquema de vacunación, pero, también, para que los niños sean incluidos, de por vida, en el Seguro Integral de Salud. Como se puede apreciar, ahora, el esquema es mixto, las primeras dos dosis son inyectables y las otras tres son orales. No fue fácil entonces, como tampoco lo es ahora, lograr que los altos funcionarios del Minsa dejen de lado las “decisiones políticas” y tomen decisiones técnicas y científicas a favor de la población. La pandemia ha puesto en evidencia una retahíla de ejemplos. 

“Errores” como los ocurridos con la “cuarta dosis” con la vacuna Moderna contra la Covid-19, que, en lugar de aplicar 50 microgramos, como refuerzo, aplicaron 100 microgramos, como si fuera de inicio. No obtante, este error no ha merecido investigación ni sanción alguna a los responsables, lo que genera desconfianza de la población en las vacunas y se crea una barrera  para alcanzar altas coberturas. Sobre todo, en las poblaciones que recelan del Estado y de los políticos, como las poblaciones vulnerables, las comunidades nativas u originarias, alto andinas y dispersas. ¡Si no hay confianza, la exhortación a vacunarse es inútil!

¡Compártelo!

Médico. Analista en temas de Salud.