El Decreto Supremo 013-2019, de declaratoria de emergencia sanitaria para enfrentar el Síndrome Guillain-Barré no ha publicado las cifras totales de casos a la fecha de la promulgación, y menos aún el número de casos estimados para el presente año, cifras indispensables para el cálculo de los futuros gastos.
A pesar de haberse promulgado en diciembre de 2018, la Ley N° 30895, que fortalece la función rectora del Minsa, aún no se aplica debido a que no está reglamentada. En consecuencia, no hay mecanismo legal que sustente el gasto del Minsa central en las regiones, o se realicen las transferencias de fondos a estas. Ante este increíble vacío legal se recurre al mecanismo de declaratoria de emergencia sanitaria, según el Decreto Legislativo 1156.
Es necesario recordar que las declaratorias de emergencias fueron mecanismos muy utilizados durante el lustro humalista. Por ejemplo, entre julio del 2014 y julio del 2016 ese Gobierno declaró 22 emergencias sanitarias y gastó S/ 344 millones para dicho fin. Es decir, estas declaratorias de emergencia permitieron a los funcionarios del Minsa y de los gobiernos regionales que los gastos no sigan el curso normal de la administración pública.